Hablar con Carlos es todo jovialidad. Es amante del deporte –árbitro de baloncesto- le apasiona viajar y para “vivir la vida… no pierdo ni un minuto frente al televisor”, nos cuenta.
¿Cómo accediste a esta beca de la Universidad de Castilla-La Mancha?
La verdad es que fue un poco de casualidad. Fue un poco antes de verano y me enteré realmente por mi madre y eché el curriculum, ¡fue un acierto en el que no podía faltar una vez más mi madre! nos comenta jocoso.
¿Cuándo te incorporaste al equipo?
Entré el 1 octubre y aunque ha pasado poco tiempo la verdad es que estoy encantado. Las personas que nos guían en el aprendizaje son súper profesionales. Es un equipo muy alegre y simpático. Todos te enseñan algo.
“¡Es que a veces parecen que son más españoles que yo!”
¿Cómo son tus compañeros franceses de Puy du Fou España en Toledo?
Cuando llegué aquí me impresionó cómo se han empapado y conocen nuestra cultura, nuestra gastronomía… ¡es que a veces parecen más españoles que yo¡ (risas). Hablan con toda naturalidad de la Plaza de la Merced, de la Iglesia de San Andrés… te dejan de verdad con la boca abierta muchas veces porque piensas .. .¡ostras, pero si no lo sé ni yo!
¿En qué consiste tu día a día en Puy du Fou?
Aunque lleve poco tiempo, lo primero que hice fue conocer bien de todo el proyecto. Ahora comienzo a abrirme y empiezo a “tocar” un proyecto real: el estudio eléctrico, la media tensión, su distribución, la baja tensión con los cuadros eléctricos, el entorno lumínico desde la entrada en carretera hasta el espectáculo nocturno, etc.
¿Qué destacas?
Que el trabajo es una manera de seguir formándote… nos han metido en la cabeza la formación post universitaria, pero si puedes exponerte desde joven al mundo laboral, mejor. Todo ello, sin dejar en mis planes continuar formándome.
“Es una pasada, porque Toledo históricamente es espectacular y Puy du Fou encaja perfectamente”
¿Cómo vives esta primera experiencia laboral en Puy du Fou como toledano?
Es una pasada, porque Toledo históricamente es espectacular pero desgraciadamente hay pocas personas que terminen invirtiendo en Toledo. Es un proyecto tan diferente, tan nuevo, tan adaptado a la ciudad y que generará tantos puestos de trabajo, que es un sueño. Yo personalmente opino que ellos están apostando más por España, por Toledo, que nosotros mismos. En el equipo francés de Puy du Fou en España solo se respira pasión por su apuesta por Toledo.
“Aunque no me pegue mucho como ingeniero, me apasiona la historia”
¿Nos cuentas algunas de tus pasiones?
Una de ellas, y aunque no nos pegue mucho a los ingenieros –sonríe- es la historia. Me encanta visitar Toledo, mi ciudad y ciudades con encanto de España. Mi último viaje fue a Florencia. También me apasiona la gastronomía.
¿Cuál es en estos momentos uno de tus sueños?
Sin lugar a dudas quedarme en este equipazo. Sería una oportunidad enorme poder trabajar como ingeniero en mi ciudad y yo estoy intentando que guste mi trabajo, y guste el trabajo de todos mis compañeros becados. Ha pasado poco más de un mes y siento que somos un equipo. Nos han acogido súper bien.
Y tengo otro, me quede o no me quede, lo que tengo claro es que no me quedaré con las ganas de visitar Puy du Fou Francia, nos comenta enérgico, aseverativo y risueño como es Carlos.